Lo primero es ser honesto consigo mismo, eso es ser libre. Si en cualquier relaciòn optamos por la transparencia y honestidad todos se sentiràn confortables con nuestros sentimientos y acciones.
 
 
 

Siendo honesto conmigo mismo siento la seguridad y el apoyo de mi alma en mi mente y en mi corazòn

-XLIV-